02/10/2010
Esto es lo que se:
La primera victima se reporto el 16 de septiembre. Su nombre, María Gomez. Murió a la 17:30 horas, comentaron en las noticias, y "revivió" tres minutos después. Ahí mismo ataco a tres enfermeras y un doctor, de ellos, el doctor fue el único en morir, y ya no se levanto.
Según las investigaciones de los periódicos locales, la victima empezó a sentirse enferma desde el día 14 por la tarde-noche. Esto me da la idea que la infección tarda dos días en corromper el cuerpo, y las enfermeras lo confirmaron al atacar el 18 del mes.
El problema se mantuvo aislado dentro del hospital, e inmediatamente se tomaron las precauciones necesarias para evitar que este problema se expandiera, pero por desgracia, María no había sido la única infectada desde el principio. Y la plaga comenzó a expandirse por la ciudad rápidamente.
Para desgracia de la mayoría, no nos dábamos cuenta de lo que pasaba en realidad. Lo que sabíamos gracias a los diarios era la extraña ola de muertes y dejaban de lado que los asesinos eran las mismas victimas.
Mi primer contacto con uno de ellos fue el día 19 mientras estaba en mi trabajo. Era cajero en un OXXO, y mientras atendía un hombre entro, parecía muy enfermo, se acerco a la parte trasera de la tienda y ah se quedo un rato, quieto, y se desplomo. Cayo al suelo con un golpe seco que resonó por toda la tienda. Dos muchachas que estaban a unos pasos de él se acercaron para ver que le pasaba. Yo decidí ignorarlo pensando que solo se trataba de un vil borracho que se había tropezado y termine de atender a las ultimas dos personas de la fila. Ya habían pasado unos minutos y una de las chavas comenzó a decir asustada que el fulano ya estaba muerto. No me quedaba mas que acercarme. Todavía ni había terminado de decidirme cuando una de ellas grito, un grito de terror tan fuerte que me desgarro los oídos, y pude verlo, el sujeto le estaba mordiendo el pie justo por encima del tobillo izquierdo. Inmediatamente apreté el botón de pánico para llamar a la policía y me acerque para ayudar a la chava. A punta de patadas logre que la soltara. Parecía un animal rabioso, que se lanzo nuevamente para atraparla. De una patada en su cabeza logre inmovilizarlo.
Mi compañero salió de la bodega y llevó a la chava herida dentro para atenderla en lo que llegaba la ayuda. yo mientras cerré la tienda, no quería que entrara ya nadie mas, en ese momento sentía que el corazón se me salia del pecho.
Cubrimos la herida con un trapo, el desgraciado le había arrancado un trozo de carne a la pobre que no dejaba de llorar. Minutos mas tarde llegaron dos patrullas. Les explicamos lo que paso y nos dijeron que era momento de marcharnos. Uno de ellos se acerco al sujeto del suelo y le disparo en la cabeza mientras nosotros salíamos y a las muchachas se las llevaba una ambulancia.